Días atrás se creó un intenso debate en nuestro blog con motivo del anuncio de las tres películas seleccionadas por la Academia de Cine como candidatas para representar a España en los premios Oscar.
Un año más, surgieron dudas ante un sistema que impide que los grandes títulos que acuden a San Sebastián sean seleccionados en sus convocatorias (por ejemplo, ‘La isla mínima’ hace un año y ‘Truman éste). La conclusión generalizada fue que, al menos para esta primera criba, debería ser un comité especializado quien seleccionara a los tres títulos, en lugar de un jurado que no suele atender a los pases privados que organizan las películas que aún no han vivido su estreno comercial.
Ahora hemos sabido que Gerardo Herrero y Mariela Besuievsky, productores de Felices 140 -una de las tres elegidas junto a Loreak y Magical Girl-, como estrategia promocional para su candidatura, han enviado a los 1.200 académicos con derecho a voto una carta y recibo escaneado de un boleto de lotería del premio del Euromillón que evoca el film.
Dicha carta ha sido filtrada por El País y está firmada por ambos productores, explicando que si toca, su empresa (Tornasol Films) “compartirá el premio con todos los académic@s de la Academia de Cine Español que voten en la 88ª edición de los premios Oscar”; y explica la elección de los números: cinco números corresponden al día, mes y año de estreno del film, el 40 por la edad de la protagonista y el 16 por el año de la ceremonia de los Oscars. Debajo, la explicación de los dos números de las estrellas: 7, por los largos dirigidos por Querejeta y el 9, por la cantidad de actores principales,
Parece ser que es habitual que los miembros reciban agradecimientos en forma de nota, postal o flores (fue el caso de Loreak) y previo filtro de la Academia. Sin embargo, según apunta El País, no han tardado en surgir las suspicacias y algunos académicos habrían mostrado su desagrado ante esta iniciativa, que el productor Gerardo Herrero ha definido como “marketing con humor”. Personalmente, me cuesta entender por qué una película debe hacer marketing ante un jurado, más allá de presentar su película y que éste valore su calidad. Todo esto hace resurgir las dudas de un sistema falto de una necesaria óptica estratégica y que en los últimos años ha dado lugar a decisiones dudosas, algo que personalidades como Agustín Almodóvar han lamentado.
Por supuesto este asunto no resta valor a felices 140, una película altamente recomendable (ver crítica), aunque creemos que la competición estará entre Magical Girl y Loreak.
