Después de ver la película “Afterparty” entiendo porque se ha aplazado su estreno numerosos veces: es que no hay por donde cogerla, y eso que sólo dura 75 minutos.
El debut en la dirección de Miguel Larraya intenta ser un plagio a la española de películas de terror para adolescentes como “Viernes 13” o “Scream”, aunque con más escenas de sexo, pero el resultado es mucho peor y parece la tesis final, sin aprobar, de un grupo de estudiantes de cine, tanto en la dirección como en el reparto, que debería haberse estrenado directamente en televisión y, a este paso, puede ser que ocurra porque todavía no hay fecha de estreno cerrada en cines (la última fecha anunciada fue el 7 de junio y se aplazó de nuevo sin fecha por confirmar)
En el reparto, donde salen muy mal paradas las actuaciones de las féminas provocando que el único que se salve de la quema sea Luis Fernández, que ya es mucho decir, está formado por Alicia Sanz (Bandolera), Ana Caldas (Carmina), Andrea Dueso (Amar en Tiempos Revueltos), Rocío León (Diamond flash) y Juan Blanco (Viral). Además, de la colaboración de Úrsula Corberó y David Seijo (El Barco).
En un principio, el guión del propio Larraya y Fernando Sancristóbal, parte de una buena idea: un ídolo de adolescentes, que protagoniza una serie de televisión de éxito, acude a una fiesta en una casa de lujo y termina encerrado en ella junto a cuatro chicas y otro chico. Poco a poco, un asesino desconocido, que manda mensajes y videos a través de un móvil, irá acabando con los habitantes de la casa. Sin embargo, el desarrollo de la trama y los momentos de tensión dejan mucho que desear. Un claro ejemplo es ver lo mal que están rodadas, y lo poco creíbles que son, las escenas de los asesinatos.
Sin duda, uno de las peores películas que ha producido Telecinco Cinema en los últimos años.
Nota El Blog de Cine Español: 2.
