CRÍTICA “DEMONIOS TUS OJOS”: EL CINE ES UN ARTEFACTO VOYEURISTA POR EXCELENCIA

El director vasco Pedro Aguilera nos entrega un thriller psicológico con tintes perversos en esta historia de voyeurismo y transgresión en la que un director de cine afincado en Estados Unidos, descubre por casualidad, consumiendo cine para adultos, a su hermana en un video erótico casero. Esto despierta en él una obsesión y para satisfacerla decide volver a su país y volver a retomar la relación que había perdido con su familia, acercándose de nuevo a su hermana. Un acto de aparente conciliación, que hace ilusión a esa hermana pequeña que había abandonado a lo largo del tiempo y que se siente atraída por la idea de recuperar una peculiar relación fraternal con su hermano mayor.

Con esta trama, el director nos mete de lleno en la psique de sus personajes, y asistimos a la proyección de unos actos no siempre sencillos, y que huyen hacia delante sin una consecuencia que responde a un estímulo, sino con la lógica interna de unas mentes infectadas por el atropello y la inmediatez de un instinto de traspasar la línea que creen establecida o que la sociedad nos invita a respetar.

Demonios tus ojos” se presentó en el último festival de Málaga en la sección Zonacine, donde se hizo con los premios a mejor actor y mejor actriz, también fue seleccionado en el festival de Rotterdam y en el festival internacional de cine independiente de Buenos Aires. Ese aire independiente le viene genial a una película con vocación provocadora, pero no de forma gratuita, sino con una atracción por lo perturbador y a la vez fascinante. Esta sugestión está sujeta a un guión que investiga de forma adecuada en el comportamiento y las acciones de sus personajes, sin que éstas se den de manera racional ni razonada, pero con un ímpetu lleno de fulgor.

El objetivo parece perseguir la verdad en los rostros de dos actores que se entregan en cuerpo y alma a la película. Julio Perillán, que había destacado en películas como “Frágil” de Juanma Bajo Ulloa, aquí se consagra con una interpretación canallesca y estimulante. Ivana Baquero, la protagonista de “El laberinto del fauno” de Guillermo del Toro, vuelve a convencer con una interpretación valiente, epidérmica, y con el dolor reflejado en sus expresivos ojos pero sobre todo con la carne supurando oscuridad y garra. En el resto del reparto nos encontramos con Eliabet Gelabert, Lucía Guerrero y Nicolás Coronado en personajes de soporte de la historia.

En el apartado técnico, la película tiene una atmósfera malsana, pero está rodada con una luz muy natural y la película es luminosa, con una fotografía suave, con colores y texturas ligeras.

Atención al final, que hace una referencia directa a “Holocausto Caníbal” de Ruggero Deodato, una comparación extrema que nos invita a pensar que el cine es un artefacto voyeurista por excelencia, y que en el subconsciente de todos siempre está el ansia de ver lo que nos provoca rechazo, o nos causa tabú, al menos en los espectadores más avezados y con más curiosidad.

Nota El Blog de Cine Español: 7.

Chema López