Tras cancelarse su rodaje en mayo por el confinamiento, a primeros de septiembre comenzó la grabación de la película “La mujer perfecta”, segundo largometraje de Arantxa Echevarría, ganadora del Goya a mejor dirección novel con “Carmen y Lola”, que se rodará en diferentes localizaciones de Madrid y alrededores. “La mujer perfecta” será una comedia con vocación comercial, sobre una cincuentona en crisis, que estará protagonizada por Belén Rueda y José Coronado y contará con producción de Lazona Films y Atresmedia. El guion es obra de Olatz Arroyo (“El mejor verano de mi vida”). Completan el reparto Gonzalo de Castro, Carolina Yuste, Pepa Aniorte y Jesús Vidal.
“La risa es el camino directo al corazón del espectador. Y yo, que soy feminista, estoy deseando reírme del propio feminismo, de la crisis de la mujer a los 50 y de las relaciones de los hombres y las mujeres a esas edades. Tenemos que reírnos de la sociedad, de lo que está pasando ahora mismo. Tenemos que ver una película escrita por una mujer (la maravillosa Olatz Arroyo), dirigida por una mujer, con una protagonista de edad madura y que además, gracias a esa risa tan necesaria, es una película que conecta con hombres y mujeres por igual. La película formalmente tiene que ser perfecta. Bella y de barrio elegante, como Lucía. Alta comedia al servicio de un giro de vida, de un punto y aparte. Me imagino las secuencias, elegantes como los vestidos de chaqueta de Lucía. Y que respire ese tono irreal de la factoría de las películas de Nancy Meyers. El mundo de Miguel, Amparo y Sara, con su camión de butano a la puerta del portal de barrio obrero, será el contraste real pero divertido. No nos asustará, nos hará reír viendo a Lucía sentirse como en un planeta de otra galaxia. Eso es lo que queremos, que tras reírse viendo la película, muchas mujeres dejen de sentirse extraterrestres y les apetezca darse un hueco, mirarse el ombligo y ser ellas mismas”. comenta Arantxa Echevarría.
¿De qué va?
Lucía cree llevar una vida modélica y tenerlo todo bajo control. Desde que se casó, volcó todos sus esfuerzos en el cuidado de su familia, hasta conseguir lo que ella cree que es el colmo de la mujer perfecta; llegar a los cincuenta sin celulitis, un hijo que te idolatra y un marido que ha aprendido a cerrar la tapa. Sin embargo, todo se empieza a derrumbar el día que aparece Sara, la novia de su hijo; una chica joven, libre y deslenguada, que dinamita todos los valores femeninos en los que Lucía cree fervientemente. A partir de ese momento es cuando descubrirá que ser perfecta no era lo que ella pensaba.
