CRÍTICA DE LA PELÍCULA “FINISTERRAE”: RARA, MUY RARA ¡PARDIEZ!

Antes de nada me gustaría hacer dos aclaraciones. En primer lugar, cuando se estrenó no tuve tiempo de verla, ahora he podido disfrutarla con una calidad de streaming excelente en Filmin, les felicito por ello. En segundo lugar, a pesar de mi titular soy ateo. 

“Finisterrae” es la ópera prima de Sergi Caballero (Barcelona, 1964), codirector del Sonar, y se nota tanto su devoción por la música avanzada como por el videoarte (videoinstalaciones) que proliferaban en Barcelona en los años 80.

“Finisterrae” nos presenta la historia de dos fantasmas que hastiados solicitan al oráculo tener una vida mortal y efímera, y para ello deberán viajar hasta Finisterre (Costa da Morte, Galicia). El film está planteado como una road movie, y tiene elementos de vanguardia y de los cuentos clásicos. Es un tipo de película en la que o entras y disfrutas o bien te aburres y tienes ganas de salir de la sala, no hay medias tintas.

Caballero quiere provocar al espectador y para ello crea disgresiones.

“Finisterrae” bascula entre lo genial y lo ridículo, y es en ese terreno donde hay que plantearse que no es un film al uso, con inicio, nudo y desenlace. De todos modos se hecha en falta más riesgo y un guión mucho más consistente, parece el primer eslabón de aprendizaje del director.

Por momentos el relato se hace cansino y el brío decae.

El viaje tiene altibajos y baches.

Puntuación de EL BLOG DEL CINE ESPAÑOL: Rara, muy rara, apta para públicos que busquen cosas diferentes.

                  José López Pérez