El pasado Festival de Málaga se convirtió en el “festival de los contrastes”. Un round involuntario de la lucha entre nuevos nombres que aprietan con fuerza (Rodrigo Sorogoyen, Miguel Alcantud, Jorge Naranjo…) y los de siempre (Querejeta, Coixet…). Para muchos, los claros vencedores pertenecen a ese primer grupo, capitaneado por “Ilusión”, gran triunfadora en la sección ZonaZine del festival.
Hemos hablado -y reído- con su creador Daniel Castro, quien a su vez encarna al ingenuo, entrañable y patéticamente idealista protagonista de esta inclasificable comedia, cuyo estilo se aleja del estándar.
-Daniel, una pregunta seria. Son las 4 de la mañana de un martes loco. Llegas al ‘Papizza’ con un hambre respetable y te encuentras a Haneke tomando la última “3 cerditos” que quedaba. ¿Qué reacción esperas de ti mismo?
No me imagino a Haneke en un Papizza, eso lo primero. Creo que sería pacífico. Yo soy más razonable que mi personaje y permitiría que se comiera la ‘3 cerditos’. Yo me comería las demás y tal vez incluso le invitara.
-¿Cuál es tu opinión -real- acerca del cine de Michael Haneke?
Es muy bueno técnicamente y en todos los sentidos. Incluso como guionista creo que es cojonudo -al igual que Lars Von Trier-. Pero a veces me da la sensación de que tiene una excesiva solemnidad; todo es denso, serio y pretende ser muy trascendente. Y a la vez, sus personajes suelen ser muy poco humanos. Sus emociones me parecen algo artificiales.
Cuando rodé Ilusión aún no había visto “Amour”, su último trabajo, donde sí observo emociones reales, amor, etc. Es muy potente y muy dura, pero entiendo más a los personajes.
-Ha habido varias personas que han dicho de tú eres el Nanni Moretti español. Pero… ¿No es Nanni Moretti infinitamente más guapo que tú?
Pero él es más viejo. Además, habría que ver si realmente es más atractivo haciendo algún tipo de competición. Él sólo es más alto y más talentoso. Espero ponerme a su altura.
-No me creo que no estés harto de los juegos de palabras con el título de tu película cada vez que a alguien se le ocurre una asociación de ideas. ¿Porqué no la titulaste “Anhelo”?
¿¿Anhelo?? Se me ocurre “canelo” como juego de palabras… La titulé “Ilusión” porque tiene dos significados. En primer lugar es la esperanza y ganas de algo. Pero también es el espejismo; cuando un ilusionista crea algo que parece pero no es. Me gustaba el juego de palabras, aunque la gente suele asociarlo a la esperanza, luego se ve que no es así.
-¿La ilusión tiene que ver en la revolución que se está viviendo en nuestro cine?
Se habla mucho de la ilusión de mucha gente por sacar adelante sus pelis. Pero luego está el espejismo. Creo que también se producirá una criba, porque no sólo la vocación o las ganas es suficiente.
-En “Ilusión” satirizas un drama real, que es la desconfianza de los productores ante nuevas propuestas.
Me hace gracia, porque alguna vez me han dicho: “gracias por abordar el rechazo de los productores cuando presentamos nuestros trabajos”. Y yo pienso, joder, si alguien me presenta un proyecto como el protagonista de mi película lo rechazaría de inmediato… Por mucho que uno persiga sus ilusiones con muchas ganas, a veces no es interesante ni conveniente que lleguen al gran público. Es decir, un musical sobre los Pactos de la Moncloa no es buena idea, como mínimo desde un punto de vista comercial jajaja.
-Pues a mí me parece una gran idea. Al menos una sátira fantástica.
Sí. Si fuera para una sátira ridícula acerca de los pactos de la transición quizá sería buena idea hacer un musical… No, en serio. Creo que es hasta sano decirle a un tío que NO cuando su idea es tan claramente pésima. Afortunadamente nunca me he visto en una situación tan ridícula como la de mi personaje.
-Pero hablando en serio, este año se están viendo nuevos nombres y muy buen cine, pero da la sensación de que cuesta mucho que esto llegue.
Sí. Hay pocas salas y se necesita un gran esfuerzo publicitario para atraer a la gente a las salas. Ocurre en películas importantes, y ya no hablemos en pelis enanas como esta, sin promoción, ni pasta, ni una tv detrás.
Salen cosas nuevas y a la vez el sistema viejo está agonizante, y ese solapamiento no parece favorable para que las películas pequeñas lleguen al cine.
De todos modos, nosotros no esperábamos que nuestra película llegara a los cines masivamente. Estoy yo de protagonista, y a mí nadie me conoce ni quiere ver. Es una peli que sólo puede ir a ver alguien a quien se la han recomendado o que le interese especialmente.
-En ese sentido, ¿crees que el contener sexo explícito ha supuesto una barrera comercial para “Ilusión”?
Bueno, ojalá contuviera sexo explícito, pero finalmente tuvimos que cortar todas las escenas pornográficas conmigo mismo. Los nervios me impidieron llegar a la erección.
-Ahora en serio. Dentro de los nuevos nombres de cine de autor son pocos los que se atreven con el humor.
Dentro de ese “otro cine” o “cine pequeño” del que se está hablando, hay varias tendencias; una más experimental o artística, como puede ser el cine de Jonás Trueba y otros directores. Y luego hay otros que estamos en un punto intermedio, menos experimental aunque fuera del habitual camino comercial. Dentro de este último grupo quizá si hay algo más de humor, como en Casting (Jorge Naranjo) o Esto no es una cita, pero es cierto que hay muy poco.
-En la película aparece varias veces un símbolo como es el rótulo del Teatro Fernán Gómez. ¿Qué te parece todo lo que se ha liado al respecto, con la retirada de las letras y posterior rectificación?
Ya he visto que gracias a vuestro blog se acaba de reponer jajaja. El otro día estuve pensando colgar una captura de mi peli. Ojalá se quede, porque para mí es un personaje mítico; un modelo de artista que todo lo hacía increíblemente bien en todas sus facetas y debería permanecer ese nombre.
-Háblanos del recorrido que está teniendo “Ilusión”.
Estoy contentísimo. Estuvimos en Málaga, donde fuimos premiados (Biznaga de Plata a la Mejor Película y Mejor Guión sección ZonaZine), Tudela (Premio Especial de Jurado en el Festival Opera Prima de Tudela (Premio Especial de Jurado en el Festival Opera Prima), Mejor Película en Marsella, Alcalá… Acumulamos 7 premios en 7 lugares donde hemos estado. Es una pasada. La semana que viene estaremos en el ‘Madridimagen’, después pasaremos por Almería, Cartagena, Bilao y otro festivales que aún no podemos anunciar.
Y hoy se estrena en los cines Golem de Pamplona, que es de donde yo soy.
-¿Qué películas españolas recientes destacas?
Destaco -aunque no es del todo reciente- Diamond Flash de Carlos Vermut. Dentro de un tono cómico más experimental me encantó Gente en sitios (Juan Cavestany). Otra que no he visto pero espero con muchas ganas es “3 bodas de más”.
“La Herida” está dentro de un tono mucho más dramático y potente pero…¡eso sí que es dirigir! Me encantó cómo estaba realizada e interpretada. Es brutal.
También creo que Casting tiene mucha frescura y los actores están muy bien. Y Stockholm es otra que tiene mucho mérito y que sería un poco el paso que me gustaría dar; tener algo más de producción pero sin llegar a perder el control creativo.
Seguro que me estoy dejando muchos títulos, pero creo que hay buenísimas pelis.
-¿Cuáles son tus proyectos?
A una pequeña productora le gustó mucho “Ilusión”, y me encargaron un proyecto cómico en el que yo sería de nuevo el protagonista. Ese sería el proyecto principal, aunque en estos momentos en los que estoy moviendo la peli es difícil centrarme.
-¿La gente de fuera de España flipa mucho con la película?
jajaja. El otro día se proyectó en un festival brasileño (Rio Branco) y aún no sé qué les pareció. Tanto en Toulouse como en Marsella se acogió muy bien y la gente se rió mucho. Además, a mí me preocupaba que no entendieran todo el rollo de los Pactos de la Moncloa, la Transición, etc., y me dijeron que no hacía especialmente falta saberlo para reírse y entender que se trata de un contexto político del que obviamente es muy absurdo hacer un musical.
-Me comentabas que hoy se estrena en Pamplona, ¿tenéis previsto algo más a nivel comercial en España?
Por ahora no. Es una película pequeña, pensada para pases pequeños, donde se realice un coloquio, etc.
Es un camino que abrieron Jonás Trueba o Elias León Siminiani para películas pequeñas, que incluso puede permitir que proyectos de tan poco presupuesto recuperen su inversión. Por lo que sé, para una película así la distribución sin un apoyo suele no ser rentable.
Además, mi intención es que esté disponible pronto en canales de pago y plataformas de Internet.
-¿Qué puede encontrar el público en “Ilusión”?
Una comedia con bastante surrealismo, que de vez en cuando pasa por puntos más amargos pero manteniendo una sonrisa. Y también puede encontrar canciones… posiblemente malísimas.
