CRÍTICA DE LA PELÍCULA “MANOLETE”: DESAGUISADO TOTAL

Rodada entre marzo y julio de 2006, “Manolete” fue una producción de Tarak Ben Ammar (Túnez, 1949) y Andrés Vicente Gómez (Madrid, 16 de septiembre de 1943). Dicen que costó la friolera de 20.000.000 de € y hasta ahora en España no se ha podido estrenar por motivos judiciales, embargada por una deuda con Construcciones Escénicas Moya empresa que realizó los decorados del film que se rodó en parte en la Ciudad de la Luz de Alicante. En Francia se estrenó la pasada primavera con pésimas críticas y una recaudación en taquilla paupérrima, en Inglaterra se editó directamente en DVD.

El film cuenta la historia del torero más famoso en la España de posguerra, Manuel Rodríguez “Manolete”, centrándose en el día en que falleció en la plaza de toros de Linares (Jaén), concretamente el 28 de agosto de 1947. Todo está rebozado con constantes y poco hábiles flashbacks para contarnos la historia de amor entre el torero y Antoñita “Lupe” Sino, todo muy descafeinado, desapasionado y donde no se explica casi nada. El guión y la dirección corren a cargo del holandés Menno Meyjes (guionista de films tan conocidos como “El color púrpura”, “El sueño del mono loco” o “Indiana Jones y la última cruzada). Meyjes (Eindhoven, 1954) construyó un guión pésimo, tedioso en el que no hay nada salvable, es un despropósito. Los personajes están poco trabajados, son planos, estáticos y no rezuman ningún tipo de vida. La interpretación de Adrien Brody es catastrófica, aparece lánguido, perdido y con total pasividad, no parece un torero en ningún momento (aunque la película le sirvió para establecer una relación amorosa con Elsa Pataky). A su lado Penélope Cruz se esfuerza e intenta dar vida al personaje, cosa que el guión le impide. Juan Echanove y Santiago Segura son meros convidados de piedra, el texto de Meyjes no les deja ningún momento para dejar su impronta.

Parece increíble que el film haya costado más de 20.000.000 de €. De todos modos, si en algún momento “Manolete” se deja ver es quizá por el trabajo del equipo técnico.

La banda sonora es de Dan Jones y Javier Limón y tiene algún momento interesante, pero a nivel general tampoco acaba de funcionar.

Soporífera y tediosa, “Manolete” parece un gran desaguisado al que tampoco ayuda el multilingüismo de la propuesta.

                       José López Pérez