Finalmente no hubo Palma de Oro para Almodóvar pero, Dolor y gloria, último largometraje del manchego, no se ha ido de vacío en Cannes ya que ha recibido el premio a mejor actor para Antonio Banderas. Una mención mediática e importante de cara a atraer al público a los cines y que pone al actor malagueño en el disparadero de cara a los Oscar.
La Palme de Oro ha ido a parar a la otra gran favorita, Gisaengchung de Bong Joon-Ho.
Este éxito para nuestro cine se suma a los premios del jurado Un Certain Regard otorgados ayer a las películas O que arde y Liberté (¿las veremos en los próximos Goya?).
Aun así, para muchos queda un regusto agridulce, ¿será la última oportunidad de Pedro Almodóvar en Cannes?