“HERMANOS DEL VIENTO” SUPONE UN NUEVO FRACASO EN LA TAQUILLA PARA WANDA FILMS

Últimamente la distribuidora y productora Wanda Films no tiene suerte de cara a la taquilla, aunque el documental “Cantábrico” sí que les funcionó muy bien, porque tras el varapalo de “El faro de las orcas”, este fin de semana también han pinchado con el estreno de “Hermanos del viento“, que con 124 copias sólo ha recaudado 69.000 €, es decir, se queda con una pobre media por sala de 556 €. Esperemos que su última producción, “Petra”, de Jaime Rosales, les vaya mejor en la taquilla para que las arcas de Wanda Films vuelvan a ver números verdes.

En su reparto destacan Jean Reno, Manuel Camacho, Tobias Moretti y Eva Kuen, entre otros. Esta película ya se estrenó cines en diciembre del año 2015 en Eslovaquia y República Checa, y en Austria, Polonia, Francia, Italia y Países Bajos el año pasado, por lo que llega, quizás, demasiado tarde a nuestras salas.

¿De qué va?

“Hermanos del viento” nos trasladará a un paraje indeterminado de los Alpes, en los años 1960, donde Keller (Tobias Moretti) y su hijo Lukas (Manuel Camacho) viven en las montañas, solos, tras la muerte de María, madre de Lukas y esposa de Keller, en el incendio de la casa familiar. Keller, gravemente afligido por la muerte de su esposa, no consigue vivir en armonía y en buen entendimiento con su hijo, quien se refugia cada vez más en la naturaleza, evitando el contacto con sus semejantes. Nada parece consolar a Lukas, hasta que un día, en uno de sus paseos por el bosque, encuentra un pollo de águila real que, expulsado por su hermano mayor, ha caído de su nido de águila. Lukas decide ocuparse del aguilucho y le da por nombre Abel, como el Abel de la Biblia, que murió asesinado por su hermano Caín. Al igual que Lukas, Abel también ha perdido a uno de sus dos padres y también, como Lukas, se siente abandonado por el progenitor superviviente. El guardabosques Danzer (Jean Reno), por el afecto que siente por Lukas, ayudará a este último a criar el aguilucho. Pero Danzer sabe que tanto el águila como el niño tendrán que crecer, superar los obstáculos de la vida, y reconciliarse con sus respectivas familias.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *