La entrevista tuvo lugar en un conocido Hotel del centro del Barcelona, por cortesía del excelente equipo femenino de la agencia de comunicación “La Portería de Jorge Juan”.
Óscar Aibar llega con cansancio acumulado y como siempre muestra un trato exquisito. El cansancio viene provocado por el ajetreo de la promoción, primero en el Festival de San Sebastián y la noche anterior con el preestreno en la Ciudad Condal. La conversación se centra en esta ocasión en su último film.
J.L.P: Ahora que “El Gran Vázquez” ya se ha estrenado, ¿qué sensaciones tienes?
Óscar Aibar: Sensaciones inmejorables, en San Sebastián era muy difícil ganar con una comedia, un milagro, algo arriesgado. Solo con poder ir a la sección a concurso y estar en una ciudad maravillosa nos damos por premiados. Los popes de la crítica la han bendecido, la reacción muy buena de la gente que me entrevista y de la gente que ya ha visto la película.
J.L.P. Santiago Segura hace una recreación buenísima.
O.A. Tener un protagonista que tiene la misma pasión por el personaje que uno es un lujo. Había un riesgo muy grande en esta película que era buscar a Vázquez, Santiago ha confiado mucho en mí, se ha tirado ahí a la piscina sin ropa, quizá de las cosas que más llama la atención de la peli y de las que más orgulloso estoy.
J.L.P. Anécdotas como la del hotel o la del principio de la película parecen totalmente reales, ¿cómo te documentaste?, ¿las anécdotas te las contó el propio Manolo Vázquez cuando os conocisteis en la redacción de Editorial Makoki de Felipe Borrallo?
O.A. Empecé como guionista de cómic en los 90 y en esa época solo se hablaba de Vázquez, ibas a una entrega de premio, al salón del cómic o a cobrar a la editorial y siempre había alguien que te contaba alguno de sus siete sablazos famosos, o contaba la última que había hecho esa semana. Empecé a llenar libretas y libretas, a través de amigos pensando en que algún día yo pudiera contar esa película. Cuando comencé a preparar el guión entrevisté a ex mujeres, antiguas victimas de sablazos, compañeros de profesión, etc. Es un guión muy elaborado el de esta película, han sido muchos años de investigación. Un guión en este sentido muy trabajado.
J.L.P. Me ha parecido una idea extraordinaria convertir las viñetas en dibujos animados.
O.A. ¡Muchas gracias! Lo que le hacía único en aquella época en la que había dibujantes brillantísimos era que el decidió dibujarse a sí mismo, decidió que lo que le pasara cada día lo iba a dibujar. El mismo cuando creó la leyenda del moroso, la leyenda de Vázquez rompió la barrera entre realidad y tebeo. En la película he tenido que hacer lo mismo, hay secuencias en las que no sabes si es cuento del tío Vázquez o es su vida. El mismo realmente no lo sabía.
J.L.P. Gracias a Manolo Vázquez Jr he podido ver de nuevo varios videos de Vázquez. Me ha sorprendido mucho la aproximación que haces al personaje. En “Plastic”, un programa de televisión de los 80, se mostraba provocador y socarrón, junto a su hija Vicky, a la que entrevisté el día del pase de prensa.
O.A, Si ves videos de él en los 60, que es cuando pasa la peli, el bigotito y todo eso, Santiago es casi igual. Nos hemos basado mucho en el Vázquez de los 60. En los Noventa era un tío gordo con coleta, con la camiseta llena siempre de manchas, con el que nos íbamos de fiesta.
J.L.P, La última vez que hablamos me comentaste que tenías varios proyectos en la cabeza.
O.A. Te cuento la verdad, amigo, siempre que acabo una peli me prometo a mi mismo que no haré nunca otra, es una locura, ahora mismo estoy agotado, sacar a Vázquez del armario ha requerido un gran esfuerzo. Voy a coger ahora unos días de vacaciones y descansar la cabeza. Esta película me ha absorbido totalmente.
J.L.P. ¿Qué relación has tenido con las 3 productoras Distinto Films, Tornasol y Castafiore?
O.A. Castafiore en realidad es Tornasol en Valencia, y realmente es la misma. La relación en esta peli con las productoras ha sido muy buena, muy feliz, además trabajar en la Ciudad de la Luz en Alicante ha sido fenomenal. Hasta ahora no entendía como el cine clásico americano se rodaba en cinco semanas. Es alucinante las ventajas que tienes, todo está a mano, hemos trabajado como se hacían las películas antes, en los años 50, entonces he podido hacer cine clásico que para un director es un sueño.
J.L.P. ¡Muchas gracias, Óscar, mis mejores vibraciones!
O.A. ¡Muchas gracias, Doc! ¡Una vez más es un honor para mí hablar contigo!
José López Pérez
