ENTREVISTA A GUILLERMO DEL TORO CON MOTIVO DEL ESTRENO DE “EL ORFANATO”

Guillermo del ToroEsta mañana nos encontramos, con motivo del estreno en España de la película “El orfanato”, en el periódico regional www.hoy.es, una entrevista al productor de la misma que no es otro que el orondo Guillermo del Toro.
Pasamos a reproducir (plagiar) textualmente la entrevista:

-¿Cómo surgió la idea de apoyar un proyecto como ‘El orfanato’?

-Cuando leí el guión me di cuenta que era extraordinario. Luego, al hablar con él, descubrimos que teníamos en mente la misma película. Ahí fue cuando decidí apoyarlo y no sólo eso, también presentar su cinta. Para mí, producir es como un flirteo y presentar junto a él la película es el matrimonio puro y duro, es decir, aquí estoy yo, Guillermo del Toro de Bayona. Es un compromiso muy serio, pero creo que este filme es cine puro, es algo especial.

-¿Dónde queda el ego del director cuando tiene que sentarse en la silla del productor?

-No lo piensas. A mí Almodóvar me dijo algo precioso cuando coproducimos ‘El espinazo del diablo’, que «el productor ideal es el que está cuando le necesitas y no está por ningún lado cuando no le necesitas». Y así ha sido, cuando recibo una llamada de auxilio hago lo que puedo, pero si no desaparezco. Creo que el productor puede llegar a ser un aliado o un profundo enemigo.

-¿Se considera el productor perfecto?

-Una persona sólo puede conducir un automóvil. Me encantaría ser un ‘bussiness man’, la verdad. Pero sucede que no he producido ninguna película en la que no crea completamente. Nunca me acerco a un proyecto pensando cómo la vamos a vender, si es muy rentable o no. Me interesa exclusivamente el director, la historia y los actores, y a partir de ahí se hace lo que necesite.

-¿’El orfanato’ se puede comparar a ‘Los otros’?

-Tal vez sea por falta de referentes. A mí me puede recordar a otras películas pero no a esa, creo que lo único que tienen en común es que son de dos directores españoles y hay un edificio encantado Pero nada más. He hablado con Amenábar acerca de cómo en ‘Los otros’ había elementos que me recordaban mucho a ‘Los inocentes’, de Jack Clayton, que está basada en una obra de Henry James. Y él me decía que no la había visto nunca. Por eso creo que hay un género que es el romance gótico, que da las pautas del género y que incluyen un misterio, un edificio abandonado, un fantasma, un personaje inocente que descubre algo nuevo. Pautas que se siguen siempre. Son componentes que están ahí

-Y el personaje femenino Belén Rueda tiene algo de Nicole Kidman.

-La idea es que en el género de terror hay dos tipos de personajes femeninos. Uno es una composición en la que es víctima. La típica mujer que grita y es perseguida por un personaje, normalmente masculino, normalmente con un arma fálica y que grita bastante. El otro tiene una composición más compleja. Son mujeres que se forjan un destino ellas mismas, que son activas, potentes e inteligentes. Quizá en ese sentido el personaje de Nicole y Belén tienen algo común. Es la otra vertiente en el cine de terror que me interesa como productor, como director y como creativo en general.

-¿Qué fue lo que más disfrutó de su papel como productor?

-Gocé mucho al ver el juego entre la cámara y los actores que creó Bayona. Lo pasé bien porque el pequeñín (Bayona) tenía una cámara muy fluida, irreverentemente bella. Me gustó mucho verle trabajar.

-¿Cómo ha sido su relación con el director?

-Conocí a Bayona cuando él tenía 15 años. Cuando presenté Cronos en Sitges entró de pronto un niño a la sala de prensa y se sentó diciendo que era periodista, cosa que hasta la fecha no sé si es verdad (risas), pero supuse que tenía más de diez años porque llevaba unas patillas bastante cutres. Descubrí que compartimos una suerte de pasión por las bandas sonoras y pasaron los años, me visitó en ‘El espinazo del diablo’ y nos hicimos amigos hasta que un día llegó con esa frase horrorosa que dice «tengo un proyecto y tengo un guión que quiero que leas». Cuando escucho eso sé perfectamente que es el fin de una amistad. Pero al leer su guión me di cuenta que era maravilloso