Elías Querejeta, productor y guionista de cine español, a sus 78 años, recibirá, como homenaje, la Espiga de Oro en la Seminci que se celebra este fin de semana.Os dejo con una entrevista que le han realizado en el diario Público, realizada por Gonzalo de Pedro.
Entrevista a Elías Querejeta:
Un premio a toda la carrera. ¿No suenan a póstumos estos premios?
Oye, vete a la mierda, ¡no te jode! Lo que me faltaba. ¿Me ves póstumo?
¡En absoluto!, pero son premios como de fin de etapa.
La carrera sigue. Tenemos una película en concurso en la Seminci, El agua de la vida, de Chumilla Carbajosa, muestra de que la carrera continúa, como el agua de un río. Hasta el mar me falta muchísimo.
Mirando atrás, ¿le faltan cosas por hacer que le apetezcan?
Seguro. Muchísimas.
¿Alguna en concreto?
Todas las que hago me apetecen, pero prefiero no hablar de ellas hasta que no estén hechas. Alguien me dijo que traía mala suerte hablar de proyectos.
¿Ni un nombre nuevo? Siempre ha tenido buen olfato para nuevos directores.
Yo siempre he tenido buen olfato para la fruta, no para los nombres.
Tendrá que reconocer que ojo tiene. Otros productores van a lo seguro.
¿Qué es lo seguro? Yo he apostado por proyectos, más que por nombres, y he tratado de sacarlos adelante. Y mi método sigue siendo el mismo, desde el principio.
Parte de ese método consiste en tratar por igual la ficción y el documental.
Para mí, todas son películas. El documental no es un reportaje, sino una película, y debe tener su narrativa y su estructura. El documental
requiere el mismo rigor que cualquier ficción.
Con su experiencia, ¿cómo ve la ley del cine?
Debería haber habido una atención sobre el cine como fenómeno cultural, como en países de nuestro entorno. Por otro lado, las nuevas tecnologías están modificando la manera de hacer y contemplar cine. Y eso no es una crisis. Ver películas en el móvil es una realidad. Hay que adaptarse y proporcionar contenidos para esas pantallas.
Hay quienes se oponen al digital.
¿Y de qué sirve? Yo escribo con bolígrafo, pero no voy rompiendo ordenadores. El digital facilita los rodajes, solo hay que mantener el rigor. El problema no está en la tecnología, sino en el que rueda.
¿Y la famosa crisis de espectadores?
Es vieja. Primero fueron los grandes cines, luego los cines más pequeños, y ahora el cine en casa. La posibilidad de rodar con más inmediatez, de difundirlo en más soportes y pantallas, es algo muy bueno.
Respecto al cine español, ¿no vive en permanente estado de queja?
Siempre ha habido quejas. Y de una crisis se puede salir debilitado o reforzado. Hay que analizar bien los motivos de la crisis y buscar soluciones. Además, la crisis económica está cambiando la situación.
¿Se está notando ya?
No lo puedo decir con exactitud, pero yo creo que sí. No lo he vivido en persona, pero es evidente que lo vamos a vivir.
Y sobre el cine español, ¿cuál puede ser el problema? Hay quien apunta a una cuestión de dinero, o de talento.
El talento siempre es un problema: unos que lo tienen y otros no. Y me gustaría ver quiénes se entienden como talentosos para decir “ese no tiene talento”.
¿Y la decisión de TVE de apoyar menos películas?
No la conozco en detalle, así que no puedo hablar. Lo que sí es cierto es que ahora es imposible producir cine sin las televisiones. Y, de la misma manera, vamos a tener que buscar maneras de colaborar con las nuevas pantallas en un futuro bien inmediato.
Entrevista vía: www.publico.es/culturas/167330/problema/nuevas/tecnologias/sino/rueda
