El festival de cine español en Australia (Spanish Film Festival), en el que Maribel Verdú ejerció de invitada ilustre, ha cerrado sus puertas con un extraordinario balance: record absoluto de asistencia, con más de 25 mil asistentes que han obligado a continuar con más proyecciones durante el mes de Julio por distintas ciudades de Australia.
Proyecciones en las que, por cierto, los asistentes han disfrutado no sólo de buen cine, sino de una refrescante y españolísima sangría -una iniciativa que aplaudo y que deberían anotar nuestros festivales-.
Entre las cintas más aplaudidas han estado “El Cuerpo”, “El artista y la modelo” o “Carmina o revienta” (definida como “bizarra e hilarante”).
Pronto hablaremos con uno de sus organizadores y os detallaremos cómo ha ido el festival.
Pero hoy toca hablar de la que seguramente ha sido la triunfadora absoluta: “Una pistola en cada mano”, de Cesc Gay, bajo el título internacional de “A Gun In Each Hand”.
El éxito cosechado durante el festival le ha permitido lograr distribución en Australia, donde ha sido estrenada este fin de semana en 18 cines, ocupando un muy meritorio undécimo puesto, acumulando 195 mil dólares.
Además, las críticas han sido excelentes, y distintos medios comparan su tono con el de American Beauty, Los Descendientes o Lost In Translation, así como el cine de Woody Allen.
Me alegra porque personalmente me pareció el mejor trabajo estrenado en el 2013. (Aquí tenéis mi crítica).
