Nos informan que el 17 de noviembre se estrenará en cines el documental “Contigo, contigo, y sin mí”, debut en el largometraje de Amaya Villar Navascués.
Se trata de un film que cierra un proyecto que captura veinte años de vida de la directora a través de las cuatro relaciones que marcaron su hoja de ruta experiencial. Una película que es, a su vez, un viaje, pero también el diario de las frustraciones y los anhelos que han dado cuerpo a su adultez.
«El amor mueve nuestras vidas. Su falta nos destruye. Sin embargo, lo dejamos para las ficciones, como si en la vida real, la de los documentales, nos diera un poco de pudor darle tanto foco. Ante ese sentimiento, que yo también tenía, esta película rompe con la contención. En lo macro, es un ensayo filosófico sobre el amor en pareja y sus fases. En lo micro, abre una gran ventana a la frescura de la intimidad, la mía, para realmente poder hablar de una más universal», subraya esta joven realizadora con una amplia trayectoria en el campo de la preproducción (guion) y la postproducción (edición).
¿De qué va?
Amaya tiene filmadas las cuatro relaciones amorosas que marcaron su vida. Recorren los últimos 20 años, del primer enamoramiento con 18 años, hasta sus actuales 38. Frente al deseo de ser madre, escribe una carta audiovisual a sus futuros hijos. Nos adentra así en un viaje hacia su pasado que desgrana las fases del amor, el reto de las relaciones a distancia y el choque entre las ilusiones y las frustraciones o la culpa. El film combina documental y animación, lo real e íntimo, con lo expresivo. Una película aparentemente personal e íntima, donde el viraje y la evolución de la protagonista se pueden leer también desde un prisma antropológico o político, reflejando el cambio del papel de la mujer en las relaciones íntimas.
