CRÍTICA “LA PEQUEÑA SUIZA”: UNA COMEDIA ENTRETENIDA PARA TODOS LOS PÚBLICOS

El objetivo de “La pequeña Suiza“, segunda película del director Kepa Sojo (“El síndrome de Svensson”), que ha tardado 13 años en volver a dirigir un largometraje, no es ganar premios ni conseguir la aprobación de los críticos sino entretener al espectador. Y esto lo consigue. Le podemos achacar un guion que podría mantener mejor el ritmo y un lío de acentos, que van y vienen en algunos personajes, sobre todo en el de Maggie Civantos; que sobre alguna historia de amor; pero a su favor tiene que entretiene, hace reír y que cuenta con unos secundarios muy buenos, donde destaca el personaje de Secun de la Rosa, el cura del pueblo de Tellería que provoca los mejores gags de toda esta historia llena de conflictos regionales y nacionales. Tampoco nos podemos olvidar de la divertida pareja cómica formada por los actores veteranos Enrique Villén y Kandido Uranga (atención al momento “caras tapadas”).

Kepa Sojo, profesor de Universidad, es un experto en el cine de Berlanga y la idea de esta película parte en gran parte de la trama de “Bienvenido, Mister Marshall” y, por cierto, como refleja en la entrevista que le realizamos, y pronto publicaremos, su primer guion se realizó antes del éxito histórico de taquilla de “8 apellidos vascos”.

En definitiva, “La pequeña Suiza” es una comedia costumbrista muy blanca, que puede ver desde un niño de ocho a un anciano de 80, y a ambos les hará pasar un buen rato.

Nota El Blog de Cine Español: 6.