LOS CINES OBLIGADOS A DIGITALIZARSE O A CERRAR

Si los cines de nuestro país llevan años sufriendo la crisis económica, la subida del IVA, la piratería y la pérdida de espectadores, desde hace unos meses les han puesto la soga definitiva al cuello obligados a digitalizar sus salas o a cerrar. El cine tinerfeño Renoir Price tomó ayer la última opción, es decir, echó el cierre.

Digitalizar una pantalla de cine cuesta aproximadamente 50.000 euros por lo que si un Multicine cuenta con 10 salas, significa una inversión de 500.000 euros. Justo ahora cuando el grifo del crédito en nuestro país está completamente cerrado.

Cada vez las distribuidoras lanzan sus estrenos con menos copias en 35 milímetros, lo que significa que los cines o se modernizan o tendrán que cerrar definitivamente.

La sangría de cierres de cines sigue en nuestro país provocando que grandes ciudades como Pontevedra (161.000 habitantes), Tarragona (130.000), Jaén (116.000), Orihuela (90.000), Avilés (77.000), y Soria (40.000) se hayan quedado sin cines en sus áreas urbanas en los meses. Además, hay otras grandes ciudades que ya no tienen la opción de ir al cine porque no hay en su ciudad, y estamos hablando de urbes con más de 30.000 habitantes.

¿Dejará de ser el cine en pantalla grande un ocio de masas en los próximos años?