
Alba Sánchez Torremocha no va a parar de trabajar después de componer la BSO de los “Los futbolísimos 2” por lo que, sin duda, aprovechamos para entrevistarla para que todos la conozcamos mejor.
Os dejamos con nuestra entrevista a la compositora Alba Sánchez Torremocha:
– ¿Qué te llevó a dedicarte a la música?
– Desde muy pequeña la música fue mi lenguaje natural. Empecé con el violín a los 4 o 5 años y en cuanto empecé a descubrir la armonía y la dirección de orquesta, me cautivó. Pero fue cuando descubrí la música de cine que todo cobró sentido para mí: unir emociones, narrativa y sonido me pareció lo más mágico que se podía hacer. Y desde entonces no he parado.
– ¿Por qué tuviste que irte fuera de nuestro país?
– Fue una combinación de buscar oportunidades y formación específica. En España hay muchísimo talento, pero el campo de la música para cine y audiovisual está más consolidado en EE.UU., con estructuras tanto académicas como profesionales que permiten un mayor desarrollo y una red de conexiones más amplia. Allí he podido trabajar en muchos proyectos, aprender de referentes activos en la industria y ampliar mis recursos creativos.
– ¿Cómo te llega la propuesta de componer la BSO de Los Futbolísimos 2?
– El equipo buscaba una voz fresca, que pudiera aportar una banda sonora ecléctica, con mucha personalidad, y algo de locura. Mi buen amigo y fantástico compositor Fernando Velázquez les propuso mi nombre y me contactaron sabiendo que tenía experiencia tanto en un sonido sinfónico al estilo de Hollywood como en estilos más modernos, que era lo que estaban buscando. Desde el primer momento, la conexión creativa con el director (M.A Lamata) fue súper especial y nos entendimos a la perfección, que no siempre es fácil.
– Como extremeño que soy, me parece curioso que hayas trabajado con la Orquesta de Extremadura para la BSO de Los Futbolísimos 2. ¿Explícanos cómo se produce esta sinergia?
– ¡Fue una colaboración preciosa! La Orquesta de Extremadura tiene una energía y una calidad impresionantes que brillan en la grabación. Quería trabajar con una orquesta española en vez de llevarme el proyecto a EEUU para dejarlo todo en casa. La orquesta de Extremadura vino muy recomendada y la sala era perfecta para grabar. Yo misma dirigí la grabación y tuve la oportunidad de trabajar con los interpretes mano a mano, y fue un verdadero placer.

– ¿Qué indicaciones te dio el director Miguel Ángel Lamata a la hora de ponerte a trabajar con la BSO de su película?
– Tuvimos una reunión inicial donde Miguel Ángel me habló del tono que quería: más “macarra”, con un punto hollywoodiense, lleno de ritmo y dinamismo. Me dio mucha libertad creativa y confianza en mi propio instinto, pero también me dio referencias claras de la visión que él tenía: desde un guiño a las grandes franquicias familiares americanas como ET, Los Goonies… hasta estilos más modernos y de acción como Misión Imposible o incluso Jungla de Cristal. A partir de ahí empecé a desarrollar temas y orquestaciones, adaptándolos luego al montaje. Fue un trabajo muy divertido, y la combinación de visión y libertad que me dio Lamata me permitió hacer una banda sonora verdaderamente única.
– Háblanos también de tu estudio sobre el bienestar mental mediante técnicas psicoacústicas.
– Es un campo que me apasiona. Estoy desarrollando una app (Willowave) que utiliza frecuencias curativas (healing frequencies), técnicas de sincronización cerebral (binaural beats) y afirmaciones positivas con fines terapéuticos, o de reprogramación del subconsciente. Es un puente entre arte y ciencia, donde la música se convierte en herramienta para el bienestar. Creo que el sonido tiene un poder profundo sobre nuestras emociones, estado mental y manera de percibir el mundo que nos rodea. Y me interesa mucho explorar ese potencial más allá del cine o los escenarios.
– Para terminar, ¿piensas repetir como compositora de otras películas españolas?
– ¡Ojalá! Esta experiencia ha sido muy enriquecedora y me encantaría seguir contribuyendo al cine español. Me he sentido muy bien acogida y creo que hay una nueva generación de cineastas con propuestas frescas y muy valientes de las que me encantaría formar parte. Si puedo aportar mi visión y experiencia internacional a esas historias, estaré encantada de seguir colaborando.












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