Continuamos con nuestras entrevistas en esta temporada de premios y en este artículo Carlo D´Ursi nos habla sobre el cortometraje “Evanescente”, que produce y protagoniza, que es candidato a los Premios Goya. Hablamos largo y tendido sobre este cortometraje, también nominado en los Forqué, y de algunos de sus próximos proyectos como el largometraje “Lo que queda de ti”, ópera prima de Gala Gracia.
Antes de comenzar, quiero expresaros mi más sincero agradecimiento, a El blog de cine español, por brindarnos este espacio para compartir la esencia de “Evanescente” y nuestros proyectos futuros.
– ¿Qué cuenta la película?
– “Evanescente” narra la desgarradora historia de Mario, un cocinero que, en un caluroso día de verano, comete el trágico error de olvidar a su hijo Enzo, de un año, en el coche. Este descuido desencadena una serie de eventos que transforman profundamente la vida de Mario y su esposa Esther, sumiéndolos en un doloroso proceso de duelo y búsqueda de perdón.
– ¿Cómo surge el proyecto?
– La idea de Evanescente nació a raíz del trabajo excelente que realizamos con Gala Gracia en la película Lo que queda de ti. Sentí la necesidad de dar a conocer a una autora con una sensibilidad y una mirada única antes del estreno de su largometraje. Gala tiene una forma muy especial de abordar el dolor y la pérdida desde una perspectiva profundamente humana, y trabajar con ella siempre es un viaje enriquecedor y emocionante. Este cortometraje es una forma de destacar su voz autoral y su talento, que estoy seguro resonará con fuerza en el panorama cinematográfico.
– ¿Por qué decidisteis contar esta historia tan dramática?
En mi trayectoria como productor he trabajado en proyectos como La memoria del agua, de Matias Bize, que estuvo seleccionado en Venecia, que también exploraba el tema de la pérdida desde una perspectiva profundamente humana. En Evanescente quisimos abordar esta temática desde otro ángulo, no tanto buscando respuestas definitivas, sino para mostrar cómo, incluso en las situaciones más difíciles, la humanidad y las emociones compartidas pueden abrir caminos hacia la comprensión y el perdón. Más que una obsesión por el tema, es un interés por reflejar historias que conecten con la fragilidad y la fortaleza del ser humano en momentos de crisis.
– Hablamos de una historia personal que se convierte en universal. ¿Cómo trabajasteis en ello?
– Como productor y actor, entendí que esta historia debía conectar desde lo íntimo para alcanzar lo universal. Por eso, abordamos el rodaje desde una perspectiva muy cercana y honesta. Como actor, me enfoqué en interpretar a Mario no solo desde el dolor, sino también desde sus silencios, sus dudas y su humanidad. Quería que el espectador se encontrara con un ser humano enfrentando sus errores, alguien profundamente imperfecto pero también profundamente real.
Desde mi rol de productor, me aseguré de rodear al proyecto con un equipo que entendiera esta sensibilidad, desde Gala y Guillermo en la dirección hasta los actores y técnicos. La autenticidad era nuestra brújula. La intención siempre fue contar una historia que pudiera resonar en cualquier persona, porque el dolor y el amor trascienden las fronteras culturales o personales. Es un reto hacer que algo tan íntimo alcance un nivel universal, pero creo que lo logramos al mantenernos fieles a las emociones y al dejar espacio para que el público proyecte su propia experiencia.
– ¿Cómo fue el trabajo con un bebé en el rodaje?
– Trabajar con Enzo, quien interpreta al hijo de Mario y Esther, fue una experiencia única. Al ser mi hijo en la vida real, la familiaridad y la conexión emocional estaban presentes, lo que facilitó la autenticidad en las escenas familiares. Sin embargo, siempre fuimos muy cuidadosos para asegurar su bienestar y comodidad durante el rodaje.
– ¿Cómo preparasteis el guion?
– El guion de Evanescente fue fruto de un proceso de desarrollo profundo que llevamos a cabo durante más de un año en Potenza Producciones, trabajando en estrecha colaboración con Gala Gracia, Guillermo Garavito y un equipo comprometido. Contamos con la valiosa aportación de Amaya Izquierdo y otros productores que estuvieron involucrados desde las primeras fases, aportando perspectivas fundamentales para afinar la narrativa y las emociones que queríamos transmitir.
Nuestra meta era construir una historia que capturara tanto la complejidad emocional de los personajes como la verdad que subyace en una situación tan devastadora. Decidimos apostar por una narrativa no lineal que reflejara la fragmentación interna que experimentan los protagonistas tras la pérdida. Fue un proceso que requirió múltiples revisiones, análisis detallados de cada escena y una reflexión constante sobre cómo permitir que el espectador no solo observe, sino también sienta y viva este viaje de duelo y redención.
El compromiso y la dedicación del equipo fueron clave para dar forma a un guion que es tanto íntimo como universal, y creo que ese cuidado se refleja en la pantalla.
– ¿Cómo está siendo la trayectoria del cortometraje?
– Evanescente ha tenido un recorrido emocionante y muy positivo en su trayectoria por festivales. Los medios lo han definido como “el fenómeno de la temporada”. Ha sido premiado en el Festival Internacional de Cine de Calzada de Calatrava y en el Festival de Cine de Ciudad Real, donde destacó por la sensibilidad y profundidad de su propuesta. Además, recibió una Mención de Honor del jurado en la Semana del Corto de Madrid, lo cual es un gran reconocimiento en un certamen tan prestigioso y consolidado, tras recorrer toda la geografía española en festivales calificadores para los Premios Goya.
Cada uno de estos premios y menciones es un reflejo del impacto emocional que la película está generando en quienes la ven. También ha sido nominado a Mejor Cortometraje Cinematográfico en la 30ª edición de los Premios Forqué y está inscrito en los Premios Goya, donde esperamos que su mensaje siga conectando con el público y los académicos. Todo esto nos reafirma en nuestra apuesta por historias que exploren el alma humana desde una perspectiva honesta y comprometida.
– ¿Qué dificultades habéis encontrado para llevar adelante el proyecto?
– Evanescente es un proyecto que no hubiera sido posible sin el compromiso y la colaboración de un equipo excepcional. Me gustaría aprovechar para agradecer profundamente a los coproductores, que creyeron en esta historia desde el principio y aportaron su talento y esfuerzo para hacerla realidad.
También fue fundamental el apoyo de instituciones y festivales que confiaron en nosotros durante el desarrollo, lo que nos permitió dar forma a un cortometraje tan complejo y emocional. La comunidad de Madrid fue la única y primera que creyó en este proyecto, al que luego se sumaron otras instituciones y operadores de TV. Cada desafío que enfrentamos fue una oportunidad para fortalecer la visión del proyecto y mantenernos fieles a la historia que queríamos contar. Es un recordatorio de que el cine es un esfuerzo colectivo y que, cuando se unen fuerzas, se pueden superar incluso los obstáculos más difíciles.
– Recientemente ha vuelto a salir una noticia sobre un hecho similar al de la película. ¿Por qué ocurre tanto?
– Lamentablemente, estos trágicos incidentes ocurren con más frecuencia de la que imaginamos. Factores como el estrés, la rutina y la sobrecarga mental pueden llevar a que, en un momento de descuido, se cometan errores fatales. Es esencial crear conciencia sobre estos riesgos para prevenir futuras tragedias.
– Estáis trabajando en un largometraje…
– Sí, estamos en la fase final de “Lo que queda de ti”, el primer largometraje de Gala Gracia, que aborda temas de duelo y pérdida, conectando profundamente con la esencia de “Evanescente”. La película está protagonizada por Laia Manzanares y Ángela Cervantes, y esperamos que su estreno sea en 2025.
– ¿Cómo habéis recibido la inscripción en los Goya?
– La inscripción en los Premios Goya es un honor y un reconocimiento al trabajo y dedicación de todo el equipo. Nos llena de orgullo y nos motiva a seguir creando historias que toquen el corazón del público.
– ¿Qué supone la nominación a los Forqué?
– La nominación a los Premios Forqué es un testimonio del impacto emocional de “Evanescente”. Nos sentimos profundamente agradecidos por este reconocimiento y esperamos que la película continúe resonando en la audiencia.
– También está inscrito al Goya otro cortometraje de Potenza, CIAO Bambina, y el largometraje CALLADITA. Sin duda, un reconocimiento a una forma de producir. ¿Cuál es la filosofía de trabajo de Potenza?
– En Potenza Producciones apostamos por una visión ambiciosa y de largo alcance. Nuestra filosofía de trabajo se basa en identificar y desarrollar contenidos de alta calidad, capaces de conectar con el gran público tanto en España como en el mercado internacional. Creemos firmemente en la creación de historias que destaquen por su originalidad y que cuenten con un acabado impecable, tanto a nivel artístico como técnico.
Nos esforzamos por trabajar con autores que aporten una mirada única y distintiva, apoyando su crecimiento y asegurando que sus proyectos alcancen su máximo potencial. Con Evanescente, Ciao Bambina y Calladita, hemos demostrado nuestra capacidad para manejar proyectos muy diversos, siempre con el objetivo de alcanzar los estándares más altos de la industria y ofrecer al público experiencias cinematográficas inolvidables.
Nuevamente, agradezco a El blog de cine español por esta oportunidad de compartir nuestros proyectos y visión con su audiencia.