EN RODAJE LA SERIE “LA NOVIA GITANA”, BAJO LA DIRECCIÓN DE PACO CABEZAS, Y TENEMOS SU REPARTO COMPLETO

Os informamos que ha comenzado el rodaje de la serie “La novia gitana”, bajo la dirección de Paco Cabezas (“Adiós”) y con producción de ViacomCBS International Studios (VIS), Atresmedia Televisión y la colaboración de Diagonal TV (Banijay Iberia). Además, también tenemos su reparto completo que está encabezado por Nerea Barros (“La isla mínima”, “La isla de las mentiras”). Completan el casting Darío Grandinetti (Miguel Vistas), Ignacio Montes (Zárate), Mona Martínez (Mariajo), Lucía Martín Abello (Chesca), Vicente Romero (Orduño), Francesc Garrido (Buendía), Ginés García Millán (Rentero), Mónica Estarreado (Sonia), Moreno Borja (Moisés), Lola Casamayor (Ascensión), Miguel Angel Solá (Salvador), Carlos Cabra (El Capi), Zaira Romero (Susana Macaya), Daniel Ibáñez (Caracas), Miguel Hermoso (Masegosa), Cecilia Gómez (Cintia), Emilio Palacios (Raúl), Oscar de la Fuente (Jaúregui) y Manel Sans (Lusson), entre otros.

Paco Cabezas, Laura Abril, Sebastián Vibes, María Cervera, Cristina Alcelay, Jaume Banacolocha, Jordi Frades, Albert Sagalés y Montse García serán los productores ejecutivos de la serie. El guion está coordinado por José Rodríguez y Antonio Mercero, encargados de escribir la serie junto a Jorge Díaz y Susana Martín Gijón. La dirección de producción corre a cargo de Laura García. Andreu Adam es el director de Fotografía, con Guillermo Spoltore como director de Arte. La música corre a cargo de Zeltia Montes.

“La Novia Gitana”, adaptación televisiva de la novela homónima de Carmen Mola, contará con ocho episodios de 50 minutos.

¿De qué irá?

Elena Blanco (Nerea Barros), una inspectora de homicidios veterana de la BAC (Brigada de Análisis de Casos). La inspectora Blanco es una mujer inteligente y obsesionada por resolver su propio horror y que, en el dolor de la familia Macaya, padres de dos jóvenes asesinadas con 6 años de diferencia, se ve tristemente reflejada. Ella y su equipo serán los encargados de buscar al responsable de un macabro ritual.