La actual situación política y displicencia manifiesta del gobierno hacia la cultura, y concretamente al cine, hace que se espere una de las galas más reivindicativas que se recuerdan desde la polémica del 2003, que se desarrolló bajo el lema de “no a la guerra”.
El comunicado que hizo público el pasado lunes el sindicato Unión de Actores y Actrices de la Comunidad de Madrid instando a los participantes en la ceremonia a mostrar sus reivindicaciones no ha hecho otra cosa que calentar el ambiente previo.
El diario ABC pide a TVE desde su publicación, bajo el titular “sectarismo en la gala de los Goyas” que no retransmita la ceremonia para evitar la difusión de protestas.
Éstas son algunas líneas del diario:
“la mala costumbre de politizar los actos culturales parece una práctica muy arraigada en determinados sectores de la izquierda” (…) “el cine es fiel reflejo de que la mansedumbre de la izquierda hacia los gobiernos de Rodríguez Zapatero no tiene nada que ver con la fiereza que muestra cuando gobierna el Partido Popular” (…) “se pretende que el ministro Wert y su equipo de Cultura se conviertan en chivos expiatorios del partidismo sectario de unos cuantos manipuladores“.
Según lo publicado, se debe replantear la emisión ya que “Entre otras cosas, porque el Partido Popular goza de una legítima mayoría absoluta conseguida limpiamente en las urnas“.
