ENTREVISTA A DANIEL SÁNCHEZ ARÉVALO POR EL BLOG DEL CINE ESPAÑOL

 Daniel Sánchez Arévalo

Con este blog no ganaré dinero ni para pagar los cafés del mes, algunos dicen que pierdo el tiempo, pero para mí que alguien, como Daniel Sánchez Arévalo, me permita hacerle una entrevista, aunque sea vía Facebook, es algo realmente apasionante – escribo esto con los pelos de punta-.

Espero que os guste esta entrevista al guionista y director Daniel Sánchez Arévalo, director de Azuloscurocasinegro y Gordos.

– El Blog del Cine Español: Como cortometrista experimentado y de éxito, ¿qué te parece el nivel de los cortos en España?

– D.S.A: El nivel siempre ha sido muy alto. Siempre salen al año unos muy buenos cortos, una cosecha fantástica. Pero sinceramente creo que ahora hay más cantidad que calidad. La llegada del video es maravillosa porque abarata costes y hay menos limitaciones para hacer cortos, pero creo que falta un poco más de respeto por los procesos, honestidad y una clara vocación de contar historias. No vale cualquier cosa. Hay una tendencia con el quererlo todo y quererlo ya. Que tu corto sea el más descargado, y llegar a la “cima” y el reconocimiento enseguida. Yo hice nueve cortos que nunca nadie vio más que yo y algún amiguete. Fue un proceso íntimo de experimentación y formación.

– ¿No te gustaría que antes de cada película en cine se visionara también un corto de calidad contrastada?

– Sí y no. Me parece buena idea siempre y cuando se avise y el espectador pueda elegir. A mí no me gusta que me pongan nada a “traición”. Yo siempre los vería, porque me encanta ver el trabajo de los compañeros, pero ya te digo, tampoco creo que sea la salvación de cortometraje, ni siquiera necesario. Hay un circuito de festivales de cortos impresionante en España. Internet también me parece una plataforma magnífica para difundir los cortos (y el cine en general), y más cuando ya se pueden descargar los trabajos con calidad muy alta.

– Volviendo al largo, después del éxito de crítica de tu Ópera Prima, Azuloscurocasinegro, el público esperaba mucho de tu segunda película, Gordos, y parece ser que no todo el mundo ha quedado contento con el resultado final.

– “El efecto segundo peli”, supongo. Las expectativas son muy altas y a veces difíciles de satisfacer. La gente te exige mucho más. Se acabó la amabilidad y los errores no se perdonan. Y por encima de todo eso, Gordos es una peli mucho más arriesgada y extrema que AOCN, por lo que es normal que provoque reacciones más extremas y encontradas. Pero no deja indiferente a nadie y eso es importante. Yo me la he jugado y sabía lo que eso conllevaba. Estoy satisfecho y sigo aprendiendo. Además, ¡sólo es mi SEGUNDA peli! Un poco de calma.

– ¿Qué significa para ti que tu película esté entre las tres finalistas para representar a España en la lucha por el Oscar?

– Ilusión, agradecimiento, fantasía… Y sobre todo el empujón mediático que nos ha ayudado a mantener la película ahí arriba en la taquilla y llamar la atención de la gente. Y eso es lo más importante, que vaya a verla cuanto más público mejor. Para eso hago yo el cine. Además el boca-boca (o boca-oreja) está funcionando realmente bien, así que espero que tengo larga vida en la cartelera.

– Como espectador y cinéfilo entiendo que el mayor problema del cine español no es la calidad de éste (se hacen películas muy buenas, buenas, regulares y malas como en todos los países) si no que las productoras y distribuidoras no se gastan apenas dinero en promocionarlas debidamente. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

– Está claro que es una asignatura pendiente. Apenas se reserva dinero en los presupuestos para la partida de promoción y marketing. Estoy de acuerdo en que hay que hacer mayores esfuerzos para llegar a la gente. Para que se enteren de las películas que se estrenan.

– Por último, no sé si conocías El Blog del Cine Español, pero nos podrías dar tu opinión sincera sobre él.

– Me parece una iniciativa fantástica, lo consulto con bastante asiduidad y yo personalmente os agradezco el esfuerzo, la dedicación y el cariño. Abrazos.

Por: Juan Francisco Pérez

Foto: Alberto Quintanilla