CRÍTICA “LA HISTORIA DE JAN”: DOCUMENTAL MUY PEQUEÑO PERO MUY NECESARIO

Hay películas necesarias y ésta es una de ellas. Bernardo Moll filma a su hijo Jan con síndrome de Down durante los siguientes años a su nacimiento. Tanto Bernanrdo como Mónica, la madre, muestran una historia de superación día a día pero siempre con una sonrisa y con mucha esperanza e ilusión de luchar por su hijo Jan. “La historia de Jan” comienza a través de un blog creado por Bernardo, donde a lo largo de los años expresa sus miedos como también alegrías al llegar Jan a sus vidas.

Esta película documental, financiada por crowdfounding, está narrada de forma sencilla y sobre todo muy humana. Somos testigos de los primeros pasos de Jan, de sus primeras palabras, de los obstáculos que se encuentran en su camino así como también de las alegrías de cada triunfo del pequeño. Cada uno de éstos se convierte en el triunfo de los tres. Acompañamos a Jan en sus días de colegio, a sus sesiones de rehabilitación, su fiesta de cumpleaños…

Los vídeos que va mostrando al espectador plasman la evolución del pequeño desde el acto más simple hasta temas de salud: el poder agarrar la cuchara y poder comer con independencia como también una NocheVieja en que acaban en el hospital con el pequeño ingresado.

En ningún momento esta película busca la compasión del espectador. En todos los momentos tanto Bernardo como su mujer muestran al mundo que a pesar de las dificultades y el esfuerzo extra que hay que dedicarle a un hijo con síndrome de Down, la alegría también es inmensa. Por lo tanto “La historia de Jan” no sólo trata sobre la evolución de Jan, sino también de sus padres, unos auténticos valientes y luchadores que, aunque muertos de miedo y muy apenados al enterarse del síndrome, aprenden que eso no debe ser en ningún momento un obstáculo para ser feliz, sino todo lo contrario. Jan es una bendición, una sensación constante de orgullo.

“La historia de Jan” es un documental sencillo y sobre todo muy sincero en el que vemos cómo los padres pasan por miedos, lo que supone un necesario período de aceptación. Esta historia puede ayudar a aquéllos padres que se encuentran en una situación similar sin que en algún momento pretenden mostrar sólo los logros obviando los momentos de dudas y tristezas. Se refleja tanto lo malo como lo bueno, aunque poniendo énfasis en que lo positivo es lo que al final abunda.

Nota El Blog de Cine Español: 8

Gabriela Rubio