LA IGLESIA COMPLICA LOS RODAJES DE PELÍCULAS EN SUS TEMPLOS

imagesPara garantizar la no ofensa a sus creyentes, así como la idoneidad de los usos extralitúrgicos en sus templos, la asamblea de Obipos del Sur ha elaborado un documento en el que blinda los actos culturales, como rodajes de producciones cinematográficas en Andalucía.

Según reza el comunicado de Odisur, este manual exigirá que para los rodajes de cine, “los promotores deberán presentar una solicitud motivada explicando la razón para elegir este lugar, y adjuntarán dos ejemplares completos del guión técnico y literario de la grabación, señalando el calendario previsto”(…) “Estos proyectos requieren un discernimiento especial en cada caso, por lo que todas las circunstancias que concurren en ellos tendrán que ser estudiadas detenidamente”, agrega el documento.

La cuestión tiene pinta de complicar el asunto y descartar productos ideológicamente opuestos. La última palabra sobre la autorización de una actividad o rodaje la tendrá el obispo diocesano correspondiente, como si de un patrimonio genuinamente privado se tratara, pese a estar exentos de impuestos como el IBI y recibir al año 10.000 millones de ayudas de las arcas públicas.

Esta norma ralentiza y complica la autorización del uso de los templos a las producciones que no sean del agrado de la Iglesia, un aspecto que deja muy claro el comunicado: “las iglesias no pueden ser consideradas como espacios disponibles para cualquier tipo de reuniones y actividades, sino solo para las que salvaguarden el carácter sagrado de las mismas y respeten su naturaleza y finalidad”.

Con la Iglesia hemos topado.