El cine español, gracias al éxito histórico de la comedia “Ocho apellidos vascos”, puede lograr este año el récord de recaudación anual desde que se recogen este tipo de datos, superando los 119,90 millones que se consiguieron en el 2012.
Si en el año 2012 se logró una cuota de pantalla del 19,5%, gracias al éxito de “Lo imposible” (41 millones de euros recaudados, que la convirtieron en la película española más taquillera de todos los tiempos, récord que le ha arrebatado “Ocho apellidos vascos”), en el 2013 la cuota bajó al 14% destacando sólo los 8 millones de euros recaudados por la película de terror “Mamá”, una coproducción entre Canadá y España.
En el 2011 fue del 15,6%, debido al éxito de “Torrente 4” que consiguió una recaudación de 19,6 millones de euros; mientras que en el año 2010 el cine español, con un 12,73% de cuota, logró su peor registro desde el año 2000, siendo “A tres metros sobre el cielo”, con 8,4 millones de euros, la producción más taquillera del año.
Al éxito de “Ocho apellidos vascos”, 57 millones de euros recaudados, y de “El niño”, que acumula ya 9 millones de euros, habría que sumar los que se esperan de producciones como “Torrente 5”, que no debería bajar de los 15 millones; “Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo”, predecimos un mínimo de 9 millones de euros; “REC 4: Apocalipsis”, no hará menos de 2,5 millones; “La isla mínima”, debería superar los 2 millones”; y “El club de los incomprendidos”, entre otras.
A día de hoy, el cine español acumula una recaudación global aproximada de 86 millones de euros, por lo que nuestro cine podría lograr recaudar en el año 2014 fácilmente más de 120 millones de euros y conseguir una cuota de pantalla histórica superior al 25%.
Una cifra histórica pero muy normal en nuestro país vecino, Francia, donde cada año su cine alcanza una cuota de pantalla del 30%. Una meta que el cine español debería marcarse cada año pero, claro, el cine español no cuenta con las ayudas que sí tiene el cine francés, ni con la mentalidad de los espectadores franceses que sí admiran su cine y no lo dilapidan como ocurre en España, donde hasta los políticos dicen que es muy malo. Spain is different!
