Meses atrás, ‘El Blog del Cine Español” asistió al homenaje a la directora Icíar Bollaín promovido por el Instituto Cervantes Español en la maravillosa ciudad marroquí de Tetuán. Allí se proyectaron sus obras y se celebró un encuentro/coloquio en el que habló largo y tendido, atendiendo a las preguntas de los asistentes.
Hoy, muchas de sus afirmaciones cobran especial relevancia con el paso del tiempo.
Contó que de pequeña era muy observadora. Observaba y callaba. Al ser niña actriz aprendí naturalmente del mundo de la dirección y llegó el momento en el que pensé “esto es lo que quiero ser”.
Aseguró que a menudo le plantean si hace ‘cine de mujeres‘, resulta curioso porque en el cine de John Ford todos los protagonistas eran hombres y nadie le preguntó si su cine era solo para hombres.
Recordó con humor el enorme rechazo que produjo “te doy mis ojos” cuando buscó financiación. Fue rechazada por Telecinco o Antena 3. Incluso un productor amigo íntimo le dijo “nadie querrá ver esto jamás”.
Nos interesamos por su opinión acerca de la situación de subvenciones. Aseguró que debemos hacer un gran ejercicio de autocrítica y buscar nuevas fórmulas de financiación. Las subvenciones al cine han sido siempre mínimas en comparación a lo que se destina a otros ámbitos como televisiones, deporte, etc. Pero por alguna razón se pone el punto en el cine. En Francia no existe este debate porque aman su cine y cultura en general. Hay que recordar que la cultura es un bien intangible, que nos representa por todo el mundo. Invertir en cine recompensado fiscalmente en países como Estados Unidos de manera que aquí sería inconcebible.
Aseguró que la falta de apoyos obliga a “buscarse la vida” fuera: es tremendamente difícil encontrar financiación fuera de España cuando se rueda en español, aunque estés avalada por actores como Gael García Bernal o guionistas reconocidos mundialmente como Paul Laverty, por lo que está en mi planteamiento rodar en inglés.
También le preguntamos por una de nuestras actrices favoritas, la heroína de Kantmandú, Verónica Echegui. Es una actriz extraordinariamente generosa con una capacidad innata para sentir y emocionarse.
Cercana y comunicativa, sólo me decepcionó en su “políticamente correcta” respuesta a mi pregunta fetiche: ¿Qué opinas de Torrente? A lo que respondió con un “salgo del paso” poco creible: no he visto ninguna película de la saga, pero conozco a Santiago Segura y me parece un tío muy ingenioso…
